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En profundidad

Una recuperación pacífica

Al igual que se hizo en el centro de Bucaramanga la Alcaldía realizó el pasado lunes 11 de febrero,  un operativo especial de recuperación del espacio público en Cabecera y sus alrededores. Muchos de los vendedores informales ya habían desocupado las calles tras la concertación con el gobierno. Gente estuvo durante la jornada.

Aunque hubo pocos artesanos en la calle 49, la Policía decomisó material de algunos de ellos.

Aunque hubo pocos artesanos en la calle 49, la Policía decomisó material de algunos de ellos.

A las nueve de la mañana el pasto verde de San Pío se confundía con el verde de 400 uniformados que con escudos, cascos y bastones se aprestaban a devolverle a la ciudadanía el espacio público que les había sido arrebatado por 210 vendedores ambulantes durante los últimos años.

Era la retoma de Cabecera, la hora cero como la había denominado el gobierno.

Al mando del secretario de Gobierno, René Garzón, un grupo de inspectores y funcionarios de la administración municipal se aprestaba a desplegarse por la zona, los camiones de la Policía estaban listos para decomisar mercancía y las grúas de tránsito hacían operativos por todo el lugar.

Una inusual calma se sentía en Cabecera y sus alrededores. Parecía como si de un momento a otro fuera a estallar el bochinche.

Sin embargo, cuando muchos pensaban que se podría generar conflicto, que habría roces y algunos brotes de violencia, sucedió todo lo contrario.

En medio de una total tranquilidad las autoridades recorrían las calles sin encontrar vendedores. ¿Qué pasó? Se preguntaron muchos.

Más del 90 por ciento de los ambulantes que durante los últimos años expendían sus productos en la calle habían desaparecido como por arte de magia.

Sus zorras, sombrillas y mercancías ya no estaban en los lugares tradicionales.

En la carrera 33 también se observó un cambio rotundo comparado con los días de fin de año.

En la carrera 33 también se observó un cambio rotundo comparado con los días de fin de año.

Excepto unos cuantos puestos de ventas de jugos y frutas, tradicionales en el sector, permanecían aferrados al piso, defendidos por sus propietarios que se negaban a dejar su sitio de trabajo.

Imágenes conmovedoras se vivieron este lunes 11 de febrero por cuenta del desalojo, esperado por todos, pero necesario y doloroso para algunos.

Concertación e historias

Quienes presenciaron los operativos en diferentes partes de Cabecera y sus alrededores se sintieron aliviados, pues parece que la concertación y el trabajo de concientización que se había hecho previamente con los vendedores dio resultado.

Sin causar molestias a nadie los ambulantes aceptaron que debían retirarse de la zona y acogerse a las opciones que daba la administración municipal.

Solo algunos representantes del grupo de vendedores se asomaron por la zona para observar el operativo y de paso manifestar ante los medios su desacuerdo con la medida.

Así lucía el ‘pasaje de los artesanos’ el martes, día si-guiente del despeje. La Alcaldía emprendió allí actividades culturales del programa ‘Te Veo Bien, Te Veo Mal’.

Así lucía el ‘pasaje de los artesanos’ el martes, día si-guiente del despeje. La Alcaldía emprendió allí actividades culturales del programa ‘Te Veo Bien, Te Veo Mal’.

Pero detrás del tranquilo operativo de recuperación del espacio público se fueron develando algunas historias que llamaron la atención.

Por ejemplo, quedó demostrado que muchos de los vendedores no eran de la ciudad y habían convertido las calles en su establecimiento comercial.

Otras eran verdaderas empresas familiares que tenían puestos aquí y allá y ganaban dinero a expensas del usufructo del espacio público.

En la Secretaría de Gobierno reposan pruebas de personas que tenían venta de perros,  pizza y empanadas en tres, cuatro y hasta cinco puestos diferentes con sucursales en dos y tres parques más.

También hay historias de emprendedores que conscientes de que era necesario devolver el espacio público a la ciudadanía decidieron cambiar radicalmente su forma de vida y despejaron sin necesidad de que los sacaran a la fuerza o les decomisaran la mercancía. Ellos hoy tienen negocios formales muy cerca de donde antes vendían productos en la calle.

Al final no hubo necesidad de utilizar los bastones, ni la fuerza; primó el entendimiento y la razón en un operativo que ojalá le devuelva las calles y las aceras a los peatones, mientras que para los vendedores haya buenas alternativas laborales.

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decomisos de mercancía se hicieron este día

Despeje también de vías

La Dirección de Tránsito de Bucaramanga participó también en la jornada de recuperación del espacio público.

La Dirección de Tránsito de Bucaramanga participó también en la jornada de recuperación del espacio público.

El primer día de labores de recuperación del espacio público también contó con acciones por parte de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga.

En esta primera jornada se impartieron 192 comparendos por parqueo en sitio prohibido y 73 vehículos fueron inmovilizados.

De los 73 vehículos inmovilizados, 59 son motocicletas estacionadas en andenes. Según voceros del grupo Control Vial de la Dirección de Tránsito, “solamente en el tramo de la carrera 35 entre calles 52 y 54 encontraron más de 50 velocípedos parqueados en las aceras.

“Cumplimos una jornada rigurosa que se inició a las 7 a. m. y culminó  hacia las 7:30 p. m. contando con el apoyo de las nuevas grúas adquiridas recientemente. Vamos a continuar con estas labores de liberación del espacio público en Cabecera y esperamos contar con dos de las cuatro grúas en este sector”, explicó Rafael Horacio Núñez Latorre, director de Tránsito de Bucaramanga.

Otros puntos despejados por parte de la Dirección de Tránsito fueron los alrededores del parque Las Palmas y de la clínica Saludcoop. La calle 46 entre carreras 35 y 36, uno de los puntos que más reclamaban los vecinos del parque San Pío, también fue recuperada.

“Legales y afectados”

Las actividades de recuperación del espacio público llegó también a la calle 52 entre carreras 33 y 31.

Esta semana se conocieron voces de protesta de algunos comerciantes de la zona quienes reclaman porque les dejen trabajar en el marco de la legalidad, como lo hacen desde hace varios años.

“Vinieron y nos dijeron que levantáramos las sillas y las mesas, y que si volvían a pasar y las veían de nuevo se las llevarían. No es justo teniendo en cuenta que pagamos arriendos, servicios y no estamos invadiendo el andén. En el permiso que tenemos (de Planeación, de la inmobiliaria y del dueño del local) dice que podemos ocupar hasta el antejardín siempre y cuando se respeten los tres metros del andén, y así lo estamos haciendo. Las ventas notoriamente han disminuido”, explicó Yolima Castilla, de un establecimiento del sector.

Algunos casos de vendedores

¡No se la lleven!

Doris Salazar, minutos previos al levantamiento de su caseta.

Doris Salazar, minutos previos al levantamiento de su caseta.

El llanto de Doris Salazar captó la atención de transeúntes. Estaba a minutos de despedirse de la caseta con la que vendió jugos naturales y salpicón durante más de 2 años, en la calle 51 entre carreras 35 y 35A.

“Necesitamos trabajar. El alcalde no nos dio solución, no nos ubicó. No hay sitio para nosotros. No nos merecíamos esto porque el alcalde está donde está es por nosotros los vendedores ambulantes. Trabajamos honradamente porque no le robamos nada a nadie y eso es lo que queremos que nos dejen hacer”, dijo mientras lograba vender un jugo de naranja.

Ella se ganaba 12 mil pesos diarios y el almuerzo se lo daba la dueña del negocio. Con este sustento Doris pagaba arriendo y alimentaba a sus hijos.

Adiós a la venta de frutas

Leidy  Gutiérrez vendía frutas

Leidy Gutiérrez vendía frutas

Leidy Xiomara Gutiérrez Vendía frutas en la calle 51 desde hace cuatro años.

“Yo fui a la Alcaldía para lo de la reubicación y me dijeron que tocaba esperar porque no había locales disponibles. Es-to es difícil porque soy madre cabeza de hogar, vivo en Esperanza II, tengo cuatro hijas y pago de arriendo $300 mil, $210 mil de transporte, servicios y comida, todo sola. Ya que nos sacaron que nos dé un trabajo o un subsidio”, comentó esta mujer a quien le quedaban libres, a diario, aproximadamente 20 mil pesos.

“Yo tan vieja y sin quién me dé un peso”

A sus 64 años Rosa María Torres llegaba a la calle 51 con carrera 35 a vender tinto, agua y gaseosa a un grupo de taxistas. Vive en El Carmen con una hija pero dependía económicamente de su venta callejera.

“Me duele que me desalojaran de esa manera, yo soy sola y no tengo ayudas de nadie para nada. No me gusta vivir de los demás y me siento acribillada. Estoy calmada, callada, pero por dentro con mucho dolor y sufrimiento porque tengo muchas deudas y con esto las estaba pagando”, dijo entre susurros mientras veía la dramática escena de Doris Salazar.

Así es la oferta de la administración municipal para vendedores ambulantes:

– Reubicación en centros comerciales y plazas de mercado.

– Aporte de un capital semilla y el apoyo socio-económico de un millón de pesos para gestionar la legalidad de su negocio.

– Programas en salud subsidiada y capacitación a través del Sena y el Imebu.

– Ofrecimiento de educación gratuita a través de la Universidad del Pueblo.

– Posibilidad de acceder al programa de vivienda de interés prioritario.

 

Calle 49 con carrera 34 

Antes, en la calle 49 con carrera 34.

Antes, en la calle 49 con carrera 34.

Ahora, en la calle 49 con carrera 34.

Ahora, en la calle 49 con carrera 34.

Escaleras del ´pasaje de los artesanos’

Antes, en las escaleras del pasaje de los artesanos, camino a la carrera 34.

Antes, en las escaleras del pasaje de los artesanos, camino a la carrera 34.

Ahora, en las escaleras del pasaje de los artesanos, camino a la carrera 34.

Ahora, en las escaleras del pasaje de los artesanos, camino a la carrera 34.

Calle 51 entre carreras 34 y 35

Antes en la calle 51 entre carreras 34 y 35

Antes en la calle 51 entre carreras 34 y 35

Antes en la calle 51 entre carreras 34 y 35

Ahora en la calle 51 entre carreras 34 y 35

Carrera 33 con calle 51

Antes, en la carrera 33 con calle 51

Antes, en la carrera 33 con calle 51

Ahora, en la carrera 33 con calle 51

Ahora, en la carrera 33 con calle 51

Así se cumplió la jornada… en imágenes

Junto al parque San Pío se inmovilizaron varios vehículos que estaban mal estacionados.

Junto al parque San Pío se inmovilizaron varios vehículos que estaban mal estacionados.

Otros sectores de la carrera 33 también fueron despejados.

Otros sectores de la carrera 33 también fueron despejados.

René Garzón, secretario de Gobierno, desde temprano impartió instrucciones al grupo de policías.

René Garzón, secretario de Gobierno, desde temprano impartió instrucciones al grupo de policías.

Policías atentos a conservar el espacio público en la calle 49 con carrera 35.

Policías atentos a conservar el espacio público en la calle 49 con carrera 35.

Vendedores artesanos de la calle 49 junto a policías.

Vendedores artesanos de la calle 49 junto a policías.

Doris Salazar se aferró a su caseta antes de ser levantada.

Doris Salazar se aferró a su caseta antes de ser levantada.

Un grupo grande de alféreces participó en la jornada.

Un grupo grande de alféreces participó en la jornada.

El parque Las Palmas también fue despejado de ventas ambulantes.

El parque Las Palmas también fue despejado de ventas ambulantes.

El llanto de Doris Salazar doblegó el corazón de algunos transeúntes.

El llanto de Doris Salazar doblegó el corazón de algunos transeúntes.

El despeje de la calle 46 del parque San Pío fue uno de los cambios más notorios.

El despeje de la calle 46 del parque San Pío fue uno de los cambios más notorios.

Este carrito de venta de empanadas y avena ubicado en la calle 51 junto al parqueadero del Éxito Cabecera también fue levantado.

Este carrito de venta de empanadas y avena ubicado en la calle 51 junto al parqueadero del Éxito Cabecera también fue levantado.

Policías vigilan el pasaje de los artesanos.

Policías vigilan el pasaje de los artesanos.