Un nuevo desafío empresarial se avecina
Silvia Becerra regresa a Bucaramanga luego del Desafío África 2013.
Belleza, seguridad, calma y valentía. Así se puede definir a Silvia Becerra, la guerrera de 25 años que por estos días retorna a la ciudad luego de su participación en el Desafío África 2013, reality del Canal Caracol.
Compartir con su familia, su novio, volver a sus cuidados de belleza, a sus rutinas de ejercicio y matricularse en la Universidad Pontificia Bolivariana para continuar su carrera como ingeniera industrial son algunas de las ocupaciones que por estos días tiene esta beldad.
Sin embargo hay una nueva faceta de su vida que marcará la diferencia… su sueño de ser empresaria será una realidad gracias a la alianza que oficializará en los próximos días junto a Adriana Liévano.
La experiencia que le ha dado el Reinado de Santander en 2009, el modelaje desde los 14 años y sus dos participaciones en un programa nacional son razones suficientes para empezar un proyecto que tendrá como bandera imponer moda en Bucaramanga.
“La idea es crear una alianza para imponer moda, que sea un lugar para que las personas se identifiquen con el estilo que manejamos y aprovechar lo que Silvia ha hecho en el Reinado y en televisión. Ella conoce bastante sobre imagen y yo tengo fortalezas como empresaria de la moda”, dijo Adriana Liévano sobre su unión con Silvia, con quien comparte una sólida amistad desde 2008.
Guerrera, lista para la batalla
La exseñorita Santander participó en el equipo de los Sobrevivientes, en la edición de este año.
Aunque los elogios hacen parte de su diario vivir, las críticas sobre su participación en El Desafío África El Origen no se hicieron esperar.
Silvia, la única santandereana que ha repetido ‘desafíos’ y la única de este año, se toma con tranquilidad estos comentarios.
“A la gente se le hace fácil decir, mientras está sentado comiendo en su casa: ella no corre, es una floja. No es fácil estar allá, a 45 grados, sin comer, sin dormir bien. Además todos tenemos más habilidades que otros, allá había triatletas, atletas, gimnastas… yo hago deporte pero para cuidarme, por salud y no de alto rendimiento, nada más, sin embargo di el 100% de mí y nunca me quejé. Incluso los paramédicos me decían cuando salí que esperaban que yo fuera la que estuviera siempre quejándose o lesionada, y no fue así. Uno no puede pedirle a su cuerpo que dé más porque no se puede. Una persona floja es la que no da todo y yo lo di todo” dijo Silvia, quien además destacó que la convivencia con personas tan distintas pusieron a prueba también su capacidad de autocontrol, a pesar de que siempre se ha caracterizado por ser muy calmada.
“Lo que no es tan fácil es entender la responsabilidad que se tiene ahora. Ya no soy la persona normal, la niña universitaria que iba a clases y ya. Ahora todas las mirada están fijas en mí, en lo que voy a decir, en cómo voy vestida, a dónde voy, con quién hablo… la vida me cambió más ahora, después del Desafío, que en la época del reinado”.
Mientras continúa proyectándose como empresaria junto a Adriana Liévano -otro de sus sueños que verá cumplidos- Silvia continuará presentando el programa de consejos comunales de la Gobernación de Santander, que se transmite en el canal TRO.
La experiencia de Adriana Liévano
Adriana Liévano ha incursionado en el campo de la moda no solo en Bucaramanga, también ha tenido su marca en Barrancabermeja, Bogotá y Medellín
Según la diseñadora industrial egresada de la Universidad Javeriana y propietaria de dos puntos con su nombre en La Quinta, la idea es aprovechar el momento por el que la exseñorita Santander pasa a nivel nacional, pues su nombre y cara son seguidos por los colombianos a través del reality de Caracol TV.
Así, con una imagen nueva le seguirá dando impulso a su proyección emprendedora que vislumbró cuando diseñó sus primeros zapatos junto a su papá, empresario del cuero.
Luego, cuando se dio cuenta que la moda sería su destino dio inicio hace 14 años a su primera tienda.
Desde entonces no he parado como empresaria y diseñadora, pues conoce hoy en día muy bien el gusto de la mujer colombiana, el manejo de una tienda, de un inventario y cómo se marca tendencia.
“Las grandes inversiones que se hacen en la ciudad son estupendas porque ofrecen nuevas y grandes marcas a la ciudad. Hay más oferta y el público se hace más selectivo, se informa más y se hace más exigente en materia de moda. Nos exige entonces a los diseñadores ser más innovadores y emprendedores, a esforzarnos más por hacer las cosas bien”, concluyó.