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“Internet me sacó de la quiebra”

En su casa de Lagos del Cacique Jaime Reina disfruta de más tiempo para él y su familia. Es un creyente de que con trabajo y entrega a Dios se pueden alcanzar grandes metas. - Nelson Díaz / GENTE DE CABECERA

En su casa de Lagos del Cacique Jaime Reina disfruta de más tiempo para él y su familia. Es un creyente de que con trabajo y entrega a Dios se pueden alcanzar grandes metas. (Nelson Díaz)

Jaime Augusto Reina Sánchez es un bumangués que hace seis años estaba quebrado y hoy goza de lo que él llama independencia financiera.

Ha escrito libros, el último de los cuales fue best seller en Amazon, dicta conferencias y disfruta del tiempo libre con su esposa y sus dos hijos.

La historia de este profesional de la Ingeniería Civil y bachiller del Virrey Solís tiene muchos matices que lo han puesto en la peor crisis económica hasta llevarlo a una solidez y tranquilidad total en el campo económico.

Cuenta Jaime que tuvo la oportunidad de trabajar en importantes empresas como Cemex Colombia y Alcatel, donde ocupaba cargos directivos y devengaba un buen salario.

Sin embargo, por su cabeza rondaba la idea de ser independiente.

Un día decidió renunciar para perseguir su sueño, lo que generó el mayor rechazo de su familia y amigos, quienes lo criticaron con vehemencia: “Estás loco”, le dijeron.Pese a todo, Jaime decidió salir de Cúcuta donde era gerente y regresar a su Bucaramanga con su liquidación, los ahorros de varios años y su auto.

Se asoció con su hermano que tenía una empresa de ingeniería y licitaba en contrataciones con el Estado. Ahí empezó su calvario. Los negocios no salieron de la manera esperada, las comisiones o mordidas que les reclamaban algunos funcionarios, así como la presión de las fuerzas extremas de este país en los lugares donde debían hacer su trabajo de ingeniería hicieron que la estantería se le viniera al piso.

La empresa entró en crisis y con ella el presente de Jaime.

Sus ahorros se fueron acabando y le tocó volver a pasar hojas de vida a distintas empresas; sin embargo no le pagaban un sueldo acorde con su profesión y especialización en Gestión Empresarial y Mercadeo Internacional.

Tras un par de años de buscar alternativas y gastar su patrimonio, se encontró un aviso en internet que lo invitaba a participar de un programa mediante el cual podía conseguir buenos ingresos.

Sin muchas otras posibilidades decidió arriesgar lo poco que le quedaba y meterse de lleno en el mundo de internet.

Lo que Jaime encontró es que existe un campo inmenso de posibilidades para trabajar a través de diferentes formas.

“La gente no se magina las posibilidades que brinda internet, hay múltiples posibilidades de negocio que durante estos seis años yo he ido explorando y obteniendo dividendos”, dice.

Jaime se dedicó a hacer publicidad en internet, a ofrecer conferencias, a invertir en la bolsa y a vender productos.

“Es un trabajo de dedicación y constancia, hay que aprender ciertas cosas claves y no desfallecer”, dice Jaime quien también advierte que en este mundo hay que estar muy atentos para evitar que algunos avivatos lo roben.

“A mí me pasó. Un día compré unos equipos y ya los tenía vendidos entre algunas personas; invertí algunos millones y al final los equipos nunca llegaron”, recuerda.

Sin embargo, su optimismo no decreció. Al contrario lo motivó a investigar más y descubrir alternativas que ha querido compartir con muchas otras personas a través de conferencias.

Jaime ha escrito libros como “Millonario en bolsa” y “El dinero sí crece en los árboles”, en los cuales cuenta su historia. Algunos no le creen pero él ha montado así toda una estructura empresarial.

¿Dónde está la clave?

Jaime y su libro 'El dinero sí nace en los árboles'

Jaime y su libro ‘El dinero sí nace en los árboles’

Jaime señala que la clave del éxito en internet está en la preparación que se tenga y en la constancia en el trabajo.

Él plantea varias formas de hacer dinero.

Una, vendiendo productos, lo cual hace comprando en países como China y luego ofreciéndolos a través de la red.

La segunda opción es vender intangibles como conferencias y charlas de capacitación.

Y la tercera es creando avisos publicitarios para grandes multinacionales que le pagan una comisión por cada cliente que consiga.

Además existe la posibilidad de aprender sobre inversión en bolsa de lo cual –dice Jaime- una colombiana se ha vuelto experta.