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Punto de Vista

La experiencia de Andrés

Fabio Peña

Editor Gente de Cabecera ([email protected])

El sonado de caso de una presunta violación en el resturante Andrés Carne de Res en Bogotá, pone de manifiesto un hecho que debe hacer reflexionar a la ciudadanía.

Sin esclarecerse aún si se trató de un acto forzado, lo cierto es que el caso deja en claro que nuevamente el tema del consumo de alcohol entre los jóvenes y la falta de control por parte de los padres lleva a consecuencias lamentables.

Que faltó seguridad en el negocio, que la niña compartía con el sujeto desde hacía varias horas, que éste la obligó a tener relaciones, que fue con su consentimiento… aún no está definido.

Lo que sí se se debe hacer es tomar ese caso como ejemplo para que los padres de familia hablen con sus hijos y pongan de manifiesto que así se esté en uno de los más renombrados negocios del país, el peligro está al acecho.

Y este caso cae como anillo al dedo, para denunciar algunos hechos que la organización RedPapaz viene advirtiendo hace algunos días en nuestra ciudad. Se trata de las llamadas excursiones de fin de año de jóvenes próximos a graduarse, en los que incluso se está ofreciendo paseos con ‘acompañantes’ y trago incluido.

Sé de varias instituciones educativas que prendieron las alarmas en torno a este hecho y están haciendo una vigilancia especial a ese tipo de actividades, así como a los mal llamados ‘prom’ que están terminando en los salones sociales de algunos conjuntos residenciales donde se pide licor a domicilio por parte de jóvenes que no superan los 16 años.

La experiencia de Andrés Carne de Res y los casos aquí denunciados deben llamar la atención de los papás y de los jóvenes para que no se expongan a situaciones lamentables como las ya ocurridas.