Menú de categorías

Nuestra Gente

¿Sabe qué funciones cumple el vigilante de su edificio?

Otra de las funciones principales de los guardas de seguridad es registrar a quienes visitan el edificio o conjunto residencial. – Didier Niño / GENTE DE CABECERA

Ayudar a llevar paquetes, dejar el periódico en el apartamento y velar por el bienestar de los niños, esas son parte de las ideas erradas que algunos residentes creen que deben cumplir los vigilantes de los edificios o conjuntos residenciales.

¿Pero en realidad cuáles son las tareas que debe cumplir este personaje tan importante para la seguridad y vida de una unidad residencial?

Juan Carlos Llanos, gerente de Coopvipatrol, empresa de vigilancia local, explicó que las funciones básicas son anunciar a los visitantes, registrarlos, controlar el acceso peatonal y vehicular, recibir correspondencia, recibir información encaminada a residentes y la más importante que es prevenir cualquier acto que ponga en riesgo la vida de residentes.

¿Cada cuánto los rotan?

“Depende de dos circunstancias, pues hay una política interna (en su caso) de rotación mínimo cada año. Estas tres condiciones son:

1. Depende del comportamiento del guarda mientras desarrolla su trabajo, es decir si hay quejas o no por parte de residentes y administradores. Si no tienen un buen manejo del público, si se quedan dormidos en su turno y ponen en riesgo la seguridad de los habitantes.

2. De la confianza. Muchas veces el guarda logra ganarse la confianza y el cariño de los residentes, quienes finalmente solicitan al administrador no cambiarlo. Cabecera, por ejemplo, es una de las zonas donde los vigilantes duran más tiempo en un sitio; algunos tienen entre 10 y 20 años de trabajar en la misma portería. Estos trabajadores logran un lazo de amistad, cercanía y respeto con la comunidad que en algunos casos les dejan las llaves de los apartamentos”.

¿Cómo y en qué se capacitan?

Velar, mediante las cámaras de seguridad, por la integridad de los residentes, y por el buen uso de las zonas comunes, es otra de las labores de un vigilante

“La Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada ha facultado escuelas para que presten servicios de formación de guardas de seguridad.

Hay varias áreas de formación dependiendo del tipo de actividad, por ejemplo en Cabecera hay varias situaciones: tienen centros comerciales, unidades médicas y unidades residenciales.

Ellos se forman anualmente y se actualizan.

Mucha de esta formación tiene que ver con la atención al cliente que es un trabajo álgido; por ejemplo en una unidad pequeña hay alrededor de 50 familias, es decir cerca de 200 personas, con diferentes tipos de carácter y la idea es que se dirija a todas con mucho respeto”.

¿Cuál es la reglamentación respecto al uso de cámaras de seguridad?

“La tecnología está a la vanguardia. La Superintendencia insta a usar los circuitos cerrados de televisión que van de la mano con la seguridad. Esto sirve de apoyo para esclarecer eventualidades que se presentan dentro de unidades residenciales. Además para proteger a los residentes. Hoy en día el 100% de unidades cuentan con estos sistemas.

Las cámaras de seguridad sirven para los casos de hurtos o accidentes, pues muchas veces las autoridades acuden a estas para encontrar material probatorio.

Existe otro método de control que son los accesos biométricos. Es un software en el que se registran visitantes, y se capta huella y foto de quien entra a unidades residenciales. Esto permite un control más efectivo de personas que visitan a diario estos sitios.

Está prohibido por ley retener la cédula de un visitante. En algunos sitios ya funcionan lectores de códigos de barras que permiten registrarse y entregar de inmediato el documento. Así hay más control y mayor veracidad en la identificación de la persona que ingresa, pues muchas veces el ladrón le apunta a presentar documentación falsa”.

Vigilar los parqueaderos es otra función del guarda de seguridad.

¿Qué dicen los vigilantes de Cabecera sobre el trato que los residentes les dan?

“En Cabecera el trato es muy bueno. No se maltrata. Hay situaciones adversas que se presentan como una persona alterada, pero no es constante que se presenten esas situaciones”.

Urbano Ayala / Edificio Santa Clara

“Soy un turnador nuevo y me dijeron que estaba prohibido dejar entrar domicilios a los apartamentos, tiene el residente que bajar a la portería a recibirlo. Me pasó hace poco que a las 4:00 a.m. pidieron un servicio de domicilio y la residente no sabía que debía bajar a reclamarlo. Cuando llegó me trató mal, dijo que era la dueña del apartamento y que yo no servía para nada. Fue una situación incómoda y difícil, pues ella no sabía que esto está prohibido”.

Hermes Díaz / Edificio Santiago de Compostela

“No se han presentado inconvenientes. Si uno les colabora es por voluntad de uno, que a uno le nace. No se ve eso en Cabecera porque aquí la mayoría de gente es muy educada”.

Manuel Robayo / Edificio Sindamanoy

“Siempre existen estos inconvenientes pero el detalle está en la experiencia que se tiene para saber manejar los distintos genios de las personas. Uno con el tiempo aprende a conocer a la gente donde está laborando y a conocer sus defectos y virtudes. Esa es la clave del vigilante. Lo malo es que a veces la gente piensa que uno es el Policía y la vigilancia es prevención e informar. Uno no es un agente de tránsito ni el que carga paquetes porque eso es lo primero que nos prohíben. Hay que tener en cuenta que si me piden el favor de cambiar un bombillo y me llego a caer y a tener un accidente, la ARP (Aseguradora de Riesgos Profesionales) no va a respondernos por esto, pues no son mis funciones. Yo llevo 25 años en este edificio y estoy muy contento aquí y creo que la gente también”.

Juan Carlos Murillo / Edificio Premier

“No he tenido problemas pues en este trabajo se convive con gente muy educada. A veces uno se sorprende de eso, de que no haya gente grosera pues todos son muy saludables. Además son generosos, se preocupan por el bienestar de uno, que cómo anda uno de salud, si ya almorcé o comí… Esto es en realidad un paraíso”.

Gerardo Corredor / Edificio Torrellano

Aquí no he tenido ningún inconveniente con el trabajo. Tengo 22 años de estar en ese edificio y pues lo poco que me relaciono con los residentes siempre ha salido bien, sin inconvenientes. Este edificio tiene ascensor desde los sótanos y casi no tengo roce con la gente, ellos pasan derecho a su piso. Aquí los vigilantes solo nos encargamos del manejo de portería y seguridad, y del ingreso de personas. Es parte de la mecánica de la seguridad”.