Con-vivencia

María Eugenia Rodríguez / Periodista del Barrio

Con armonía… la vivencia es el flujo de lo vivido, la experiencia interna que se incorpora a la personalidad como propia corriente de la conciencia.

La normativa en el nuevo Código de Policía, ley 1801 de julio 29 de 2016, que desde 1970 no efectuaba modificaciones, es una invitación a prevenir para no tener que castigar.

Los 243 artículos como disciplinazo a la debilidad familiar, a la dejadez en la transición de valores para ponernos en “forma” a enamorarnos de la actitud amable, veraz y ordenada.

Si la ciudad en ciertos aspectos no gusta, el aspecto señorial y bello se edifica y se hacen esfuerzos supremos por mejorar, ¿pero de qué sirve todo ese esfuerzo si falta la colaboración personal de cada uno de sus habitantes para su conservación y para su utilización adecuada?

La convivencia no es tarea fácil porque una reorganización drástica puede provocar cambios muy drásticos en el estilo de vida, pero eso transforma; en otras palabras, cuando pones tu casa interior en orden el aire se vuelve fresco y muchos deseos mundanos se reducen.

¡Adelante con el esfuerzo por una sana convivencia en esta ciudad de marcados contrastes no solo urbanísticos, religiosos, culturales y hasta en la imposición de “caprichos” individuales por encima del bienestar comunitario!

Apartarnos de tanta “belleza fatal” para volvernos a la “belleza vital” donde se pongan de acuerdo todas las disonancias y discordancias, todas las oposiciones y divisiones es camino a seguir por una consciente convivencia.