Menú de categorías

Portada, ¿Qué pasa?

Invasión del espacio público: un tema de nunca acabar

Redacción

Hasta el parque San Pío llegaron las ventas informales que van desde frutas hasta fritos y artesanías. – César Flórez / GENTE DE CABECERA

Cada vez hay menos espacio para el peatón, esa es una de las quejas que más se escucha entre los residentes de Cabecera del Llano, quienes aseguran estar cansados de la gran cantidad de vendedores informales que invaden sus andenes y parques.

Y es que muchos aseguran que caminar por algunos andenes de este sector de la ciudad se convirtió en una carrera de obstáculos en la que deben esquivar desde vendedores, carros, motos, mesas y sillas hasta maniquíes.

“Diariamente aumentan las personas que instalan sus improvisadas ventas en los andenes. Hasta el parque San Pío se convirtió en escenario de venta de toda clase de comidas, que además de quitarnos espacio público ponen en riesgo nuestra vida, pues algunos de los vendedores salen con cilindros de gas a la calle”, expresó Esperanza Reyes, residente del sector.

Además de lo que se observa a diario, esta problemática quedó evidenciada una vez más en la reciente encuesta de percepción ciudadana ‘Bucaramanga Metropolitana cómo vamos’, cuyos resultados se conocieron la semana anterior.

Los andenes de la carrera 33, ampliados hacia el año 2002, se han convertido en el punto de mayor concentración para las ventas ambulantes y la ocupación ilegal del espacio público. -César Flórez / GENTE DE CABECERA

Un 60% de las personas consultadas están insatisfechas con el espacio público de Bucaramanga, de acuerdo con dicha encuesta, llegando a su percepción más baja en los últimos tres años.

Con respecto a este tema, el Teniente Ricardo Montoya del CAI de San Pío, aseguró que junto con la Administración Municipal están trabajando en operativos constantes en las zonas más críticas de Cabecera, con el fin de recuperar el espacio público y hacer cumplir el Código Nacional de Policía.

“Estamos trabajando en conjunto con la Alcaldía en operativos contra la invasión del espacio público por sectores. En este caso lo que estamos haciendo es aplicar la sanción y dejar la anotación en nuestra base de datos, pues en el caso que la persona reitere en la falta se procederá con la incautación de su mercancía”, explicó el Teniente Montoya.

Una situación que además ha llevado a la Alcaldía a estudiar alternativas de reubicación con proyectos como el “Plan Maestro de Espacio Público”, que avanza a paso lento.

¿Y la invasión de los vehículos?

Así luce a diario el sector peatonal ubicado entre las carreras 35 y 36, un lugar escogido por decenas de vendedores que exponen sus productos afectando la movilidad de los peatones. -César Flórez / GENTE DE CABECERA

Como se mencionó, la problemática no solo abarca las ventas ambulantes, también el comercio formal que se toma las zonas peatonales.

La falta de civismo, la insuficiencia de parqueaderos en ciertas zonas y sobre todo la cultura en la que priman los automotores sobre los peatones, agravan la situación.

Por este motivo, durante el año pasado la Alcaldía de Bucaramanga y la Dirección de Tránsito implementaron la instalación de cepos para castigar y prevenir el parqueo indebido de automotores, con una inversión que superó los $200 millones.

La comunidad denuncia el aumento desmedido de toda clase de ventas sobre los andenes de la calle 51 entre carreras 33 y 35, así como en el parque San Pío. – César Flórez / GENTE DE CABECERA

Sin embargo, la medida no cambió la conducta de miles de conductores, pues según cifras de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga, el año pasado se impusieron 21.181 sanciones por mal parqueo, lo que representa un aumento del 44% respecto al 2017, siendo la Comuna 12 uno de los sectores con más infractores.

La opinión del experto

Para Yany León, directora del programa ‘Bucaramanga Metropolitana Cómo Vamos’, temas como el desarrollo urbanístico sin retribución al espacio público, además de la invasión de los vendedores ambulantes y de los vehículos, influyen en la baja percepción de la ciudadanía sobre este factor en Bucaramanga.

En cuanto a las soluciones, la experta coincide en que la educación debe ser el motor principal para evitar las situaciones más comunes que afectan la ocupación del espacio público.

“El tema de los vendedores informales se debe a aspectos relacionados con la baja economía del país y a la falta de oportunidades labores que en su mayoría están relacionadas con la falta de cualificación.

“En ese sentido se debe apuntar a la educación en sectores vulnerables, a la generación de empresa y del emprendimiento”, explicó León.

Así mismo cuestiona la falta de civismo de los conductores, quienes para ella no conocen los deberes que adquieren al comprar un vehículo.

“Las personas deben entender que al comprar un carro deben tener la responsabilidad de guardarlo en los sitios permitidos, así como pagar los impuestos y demás. Por eso, creo que se deben intensificar las campañas de educación vial, no solo con el fin de evitar accidentes, sino para propiciar buenas prácticas de cultura vial”, completó.

El pase de diapositivas requiere JavaScript.